Arráncame toda. No te dejes ni un pliegue de mi piel sin arañar. Arráncame todo lo que me duela. Que lo que duele, son las primeras capas. Arráncame pues la piel. Arráncame todo eso que no sea profundo. Arráncame los huesos, arráncame toda. Pero no me arranques el alma.
No me arranques el alma. Que me dice que está sintiendo demasiado, que hacía mucho tiempo que no sentía así. Ni tan bien. Rómpeme toda. Y todo. Rómpeme los esquemas, las teorías del amor. Que nada sirve ya. Y cuando esté rota, constrúyeme de nuevo. Conviérteme en todo lo que he querido ser y no soy. Conviérteme y protégeme.