"Una, dos, tres..." - contaba la niña las gotas de lluvia caer. Alzó la cabeza y miró esa nube gris que la atormentaba desde hacía ya un tiempo. El viento acariciaba su rostro pero ella se mantenía inmóvil. Con la mirada perdida y los sentimientos tambaleantes, sus labios dibujaron un leve suspiro, uno de esos que dicen "tranquila, todo estará bien". Pero eso ya no funcionaba, había dejado de ser niña.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Originalidad 100% of A trip without end.